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miércoles, 4 de junio de 2014

Abdicación Juan Carlos I.

Bueno, ya está, ya ha abdicado Juan Carlos I.

¿Y ahora qué?

Al parecer, nuestra Constitución, que de momento y hasta que se revise y en su caso se modifique, es la única que tenemos y a la tenemos que recurrir para solucionar este tipo de cosas a fin de que no haga cada cual lo que le plazca; en su artículo 57, punto 5 dice textualmente "Las abdicaciones y renuncias y cualquier duda de hecho o de derecho que ocurra en el orden de sucesión a la Corona se resolverán por una ley orgánica."
 

Pero, ¿qué es una Ley Orgánica?.

Según la Wiquipedia "es aquella prevista en la Constitución Española de 1978 que requiere el voto favorable de la mayoría absoluta de los miembros del Congreso de los Diputados en una votación final sobre el conjunto del proyecto aprobado.", es decir, que debe aprobarse por, al menos, la mitad más uno de los votos en una votación realizada una vez realizados todos los trámites.

Esta es, hoy por hoy, la única forma de elegir al sucesor de Juan Carlos I.

Corresponde pues al Gobierno, que sigue siendo el elegido por los españoles, y hasta que unas nuevas elecciones lo desautoricen, plantear la sucesión del monarca. Y este, el Gobierno, ha apostado por continuar con la monarquía y ha apoyado la proclamación de Felipe VI como nuevo rey.

Visto lo visto, y sin que ello quiera decir que yo sea monárquico, ni tampoco que no lo sea, lo más fácil en aras a mantener una estabilidad, es seguir la ley.

Está claro que, desde el punto de vista de los republicanos, es ahora el momento del cambio, pero también es cierto que este tipo de transiciones suele acarrear convulsiones sociales que, en la actualidad, no ayudarían en nada a la confianza necesaria en nuestro país a la hora de salir de la profunda crisis por la que, a pesar de todo, seguimos transitando.

No quiero plantear en esta página pros ni contras sobre la monarquía o la república que cualquiera podría rebatir y nunca llegaríamos a una acuerdo. Lo que si me gustaría matizar es que en la actualidad se relaciona la republica con políticas izquierdista, cuando en realidad la república se define como "Organización del Estado cuya máxima autoridad es elegida por los ciudadanos o por el Parlamento para un período determinado" sin especificar su ideología.

¿Por qué no podría plantearse una república de ideas conservadoras?, igual parte de la sociedad que en la actualidad se decanta en este sentido, se sentiría más identificada y apostaría por ella.

En cualquier caso esta debería ser una opción a plantear desde la serenidad y legalmente, no a base de manifestaciones que, seguramente, los más radicales aprovecharán para exaltar a la población y provocar disturbios sociales que en nada beneficien a nuestra sociedad ni a la visión que de nosotros se tiene en el extranjero.

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