Al margen del resultado del partido Villarreal - Barcelona de este fin de semana, del que ya se ha hablado y se hablará mucho más si no se consigue ganar un partido más de los tres que nos quedan, y el Valencia gana los tres, cosa poco probable visto su calendario; el otro tema a destacar es el lanzamiento de un plátano al jugador del Barcelona Dani Alves.
Si con el bote de humo la afición se unió en un grito unánime, proclamando la no violencia en los campos de fútbol, pidiendo que se descubriera al agresor y se le diera su merecido, esta es otra ocasión en que deberíamos alzar nuestras voces, ahora contra el racismo, descubrir quién lo lanzó e impedirle la entrada en el Madrigal de por vida.
Queremos ser una afición modélica, y me consta que la inmensa mayoría del aforo del campo lo son, pero energúmenos como estos, manchan el nombre de la afición amarilla.
En cualquier caso, no debemos hacerlo solo por nosotros los aficionados, debemos hacerlo por las personas que sufren los insultos y las humillaciones que se les pretende infringir con actos como estos.
Des esta página quiero posicionarme en contra de cualquier tipo de desprecio a las personas:
NO AL RACISMO
NO A LA XENOFOBIA
NO AL SEXISMO
NO A LA HOMOFOBIA
...
sea cual sea su forma de manifestación, pero mucho más si se trata de manifestaciones públicas que puedan ser tomadas como ejemplo por niños que acuden a los eventos deportivos, como es este caso, y que pueden considerar que esto es de valientes, en lugar de creer que es una cobardía insultar y menospreciar a las personas, amparados por el anonimato que da el estar escondido en un colectivo.
30/04/14
Dicho lo dicho anteriormente, y visto el cariz que están tomando las cosas, también he de comentar que cada delito debe tener su castigo proporcional, y en este caso quizá nos estemos pasando.
Entendería como castigo la prohibición de entrar en campo de fútbol durante un periodo más o menos largo, incluso, si me apuran, durante toda la vida, si de lo que se trata es de dar un castigo ejemplarizante; pero lo que no entiendo ni apruebo es, como se está diciendo, que lo echen del trabajo, tratándose de un empleo que nada tiene que ver con el fútbol, con el racismo ni con los plátanos.
El chaval que tiró la fruta al campo, me consta que es un buen chico, que en un momento de indignación o nerviosismo tiró lo que tenía a mano, sin ninguna intención racista, y sin pensar que Diego Alves es una persona de color. Igual se lo hubiera podido tirar a Xavi si fuera este quien hubiera lanzado el corner.
Al final, lo que quiero decir es que no saquemos las cosas de quicio, y no estigmaticemos para toda su vida a un buen chico que el único pecado que hizo fue tirar una fruta en un campo de fútbol.
Desde aquí todo mi apoyo, no a la acción, pero si a la persona que no se merece lo que le estamos haciendo.
30/04/14
Dicho lo dicho anteriormente, y visto el cariz que están tomando las cosas, también he de comentar que cada delito debe tener su castigo proporcional, y en este caso quizá nos estemos pasando.
Entendería como castigo la prohibición de entrar en campo de fútbol durante un periodo más o menos largo, incluso, si me apuran, durante toda la vida, si de lo que se trata es de dar un castigo ejemplarizante; pero lo que no entiendo ni apruebo es, como se está diciendo, que lo echen del trabajo, tratándose de un empleo que nada tiene que ver con el fútbol, con el racismo ni con los plátanos.
El chaval que tiró la fruta al campo, me consta que es un buen chico, que en un momento de indignación o nerviosismo tiró lo que tenía a mano, sin ninguna intención racista, y sin pensar que Diego Alves es una persona de color. Igual se lo hubiera podido tirar a Xavi si fuera este quien hubiera lanzado el corner.
Al final, lo que quiero decir es que no saquemos las cosas de quicio, y no estigmaticemos para toda su vida a un buen chico que el único pecado que hizo fue tirar una fruta en un campo de fútbol.
Desde aquí todo mi apoyo, no a la acción, pero si a la persona que no se merece lo que le estamos haciendo.
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