Llamadas Inoportunas.

De un tiempo a esta parte se está poniendo de moda ir a la caza y captura de nuevos clientes vía teléfono.

Son, principalmente, las propias compañías telefónicas, o las eléctricas a partir de la liberación de este mercado, las que suelen utilizar lo que se llama “Call center” o centro de llamadas, desde ahí, los operadores se dedican a llamar a una serie de posibles clientes para ofrecerles sus servicios, mejorando si se puede los precios de la compañía con la que se tienen contratados. En caso de que el cliente lo acepte, la llamada es transferida al departamento comercial, donde le toman los datos grabando la conversación, con lo que toma fuerza de contrato. A parir de ese momento la nueva compañía realiza todas las acciones necesarias para pasar a ser ella la que preste el servicio y por supuesto es la que empieza a facturar.

Hasta aquí todo resulta muy cómodo, siempre u cuando al cliente le interese la oferta que le presentan, pero es que estas llamadas no discriminan a unos u otros, de hecho no hay modo de discriminarlos, y como me imagino que los ficheros de nombres los consiguen todos de los mismos sitios, pues si una persona está en ellos, recibe la llamada de todos los operadores que hay en el mercado.

Las primeras veces resulta curioso ver como saben tu nombre y como se preocupan por ti, el servicio que estás recibiendo y la calidad del mismo, y por ofrecerte uno mejor. Hay quién hasta se cambia de compañía, de hecho yo estoy en Ya.com por una de estas campañas.

Pero llega un momento en que realmente te cansas de recibir tantas llamadas, porque además hay que decir que suelen ser a la hora de comer o de estar reposando un poco, esos quince minutos tan buenos de siesta, y mediante llamadas ocultas.

Por mi parte, y tras la experiencia de muchas llamadas, en las que al principio intentaba ser educado y paciente, escuchaba toda la perorata que el operario me soltaba y después le decía que no me interesaba; después pasé directamente a decirles que no necesitaba nada, y en un posterior estadio ya les indicaba que no me molestaran a esas horas. Ahora, cuando veo una llamada oculta, descuelgo el teléfono, para que les cueste al menos el establecimiento de llamada, y cuelgo inmediatamente.

Se que no está bien, porque alguna vez puede ser algo importante, pero si alguien quiere algo de mi, que no oculte el número desde el que llama.

Supongo que algunos de vosotros habréis pasado por algo similar y reconoceréis lo molesto que resulta.

No se que se puede hacer ante esto, pero si alguien tiene alguna solución legal que la proponga y a ver si nos libramos de este tipo de caza de clientes.